DAME UN CORAZÓN
Dame, Señor un corazón
vigilante
para que ni un solo
pensamiento
sin sentido me
aparte de Ti.
Un corazón noble,
que ningún sentimiento
vulgar me derrote.
Que ninguna mala intención
me aparte de Ti.
Un corazón fuerte,
que ningún dolor lo rompa
Un corazón libre,
que ninguna adicción
lo haga esclavo.
Dame, Señor una inteligencia
que te conozca
junto a la necesidad
de buscarte.
Una sabiduría
que te encuentre.
Una vida que te complazca.
Una perseverancia
que se apoye en Ti
y la confianza para
conseguir tu protección
Amén
El trabajo honra los dones
del Creador y los
talentos recibidos
El trabajo puede ser un medio
de santificación y de animación
de las realidades terrenas
en el espíritu de Cristo.