Decítenos rumbo,en la encrucijada camino seguro,la meta acertada decite sentido y final, de nuestra existencia tierra prometida,ciudad celestial
Decítenos, Vida que arranca el dolor de esta única muerte, que es estar sin vos Proclámate Resurrección, victoria escondida fuerza que recrea, certeza y pasión
Decite Maestro,resuena tu Voz reconoceremos,tu canto Señor Decítenos puerta y hogar, Pastor del rebaño, que anhela tus pasos nuestra humanidad
Lucero de la mañana, en Tí vive la confianza Esperamos tu Palabra, tu verdad... Cuando vuelvas otra vez, la esperanza será vida nueva, toda en Ti, al final...
Decítenos canto,nuestra plenitud brilla en las tinieblas, anunciatenos Melodía dulce y capaz, de hacernos hermanos recítate despacio, decítenos hoy
decítenos,agua del cauce desierto de tierra agrietada, del día reseco. Mostrátenos hoy manantial, que inundas la vida renuevas el suelo, verdea tu amor
Decítenos hijo, en la soledad Oh rostro del Padre, en nuestra orfandad Decítenos intimidad, cálido abrazo Lugar del remanso, donde descansar
Si sentís un murmullo muy cerca de ti, un ángel llegando para recibir todas tus oraciones y llevarlas al Cielo.
Así, abre el corazón y comienza a alabar el gozo del cielo todo sobre el altar, hay un ángel llegando y bendición en sus manos.
Hay ángeles volando en este lugar, en medio del pueblo y junto al altar, subiendo y bajando en todas las direcciones.
No sé si la Iglesia subió o si el Cielo bajó, si sé que está lleno de ángeles de Dios, porque el mismo Dios está aquí.
Cuando los ángeles pasan la Iglesia se alegra, ella canta, ella llora, ella ríe y congrega, enfrenta al infierno, disipa el mal. Siente la brisa del vuelo de tu ángel ahora, confía hermano pues esta es tu hora, la bendición llegó y te la vas a llevar.
No se enciende una luz para no dejarla brillar. Ni se emprende un camino que luego no has de seguir. No se escucha del cielo un mensaje para callar. Ni se puede ser libre si piensas que has de morir. No se puede creer en Cristo sólo por lo que oyes o has visto. Tú debes creer porque Él se entregó, con todo su ser, por ti por amor.
Él vive en ti y en mi, y en aquel que cree en su nombre y practica el bien, sabe esperar, aún sin ver pone su confianza en Dios. Él vive. Él no está allí, mira bien, la tumba vacia nos dejó. El amor venció al final, y en la cruz selló su victoria. Él vive.
Puede caerse el cielo o cubrirnos la tempestad. Y hasta puede que el miedo llegue a nuestro corazón. Pero ten la certeza que no existe oscuridad, que haga cesar el fuego que alumbra la salvación. No existe sombra ni penumbra, que empañe su amor que deslumbra. De Él es el poder, la gloria y la verdad, el que crea en Él, nunca morirá...
Él vive en ti y en mi, y en aquel que cree en su nombre y practica el bien, sabe esperar, aún sin ver pone su confianza en Dios. Él vive. Él no está allí, mira bien, la tumba vacia nos dejó. El amor venció al final, y en la cruz selló su victoria. Él vive. Tema 1 del CD Reflejo de Amor de METANOIA
Den al señor sus alabanzas, denle poder, honor y gloria, a una voz canten un himno al Señor.
Den al señor sus alabanzas, denle poder, honor y gloria, a una voz canten un himno al Señor.
en siete dias creo Dios al mundo, Adan pecó y perdió el cielo, Jesus vino para redimirnos, murió en la cruz y nos salvó
Den al Señor sus alabanzas, denle poder, honor y gloria, a una voz canten un himno al Señor.
Dios dijo a Moisés: haz mi pueblo libre. Yo seré tu guía, siempre sígueme. Salidos ya de Egipto y el mar pasaron cantaron y bailaron, se llenaron de júbilo.